Acercándome.

Pasito a pasito lento,
voy avanzando hacia ti.
Cierro los ojos y pienso
en cada abrazo que te dí.

Mejoro gracias a ti.
En tan sólo siete años
me enseñaste a sentir, a vivir...
todo lo que ahora extraño.

Nunca me rindo, seguiré fuerte,
porque te traigo en mis sueños.
Me besas con cariño la frente
y siento tu calor de nuevo.

Eres la luz de mi mirada,
el amor de mis abrazos,
el aire de mi respirar,
el más dulce de mis encantos.